Los gatos tailandeses son muy inteligentes, sociables, cariñosos y nada agresivos. A menudo, los gatos tailandeses se confunden con los gatos siameses, pero en realidad son razas completamente diferentes, cada una de las cuales tiene sus propios estándares.
Instrucciones
Paso 1
Antes de elegir un gatito, piense si planea participar en exposiciones con su mascota. Si solo desea un gato leal, cariñoso y hermoso que se convierta en un buen amigo para usted, el cumplimiento de los estándares de la raza no debería molestarlo. Si la carrera de exhibición de la mascota te emociona y quieres que participe en la cría, debes prestar especial atención a su apariencia.
Paso 2
Conoce al gatito y obsérvalo para sacar conclusiones sobre su carácter y comportamiento. La mayoría de los gatitos tailandeses de pura sangre con un buen pedigrí tienen un carácter maravilloso y una psique estable, por lo que también debes prestar atención a los padres del bebé. Por cierto, recuerde que a los gatos a menudo no les gustan los olores ásperos y fuertes, por lo que no se recomienda usar perfumes, desodorantes al visitar a un gatito. De lo contrario, puede disgustar al bebé.
Paso 3
Eche un vistazo de cerca a la futura mascota, asegúrese de que cumpla con los estándares de la raza. Un gatito tailandés debe tener un hocico redondeado con un mentón fuerte, orejas de tamaño mediano bien separadas y ojos redondos y oblicuos. El cuerpo debe estar apretado, con un pecho ancho. Los gatitos tailandeses tienen patas relativamente pequeñas, redondas, de longitud media. La cola debe ser gruesa en la base, no demasiado larga, pero no demasiado corta.
Paso 4
Asegúrese de ver si el gatito tiene fallas externas que puedan arruinar seriamente su carrera en el programa. La cabeza no debe ser plana ni angular. Las piernas demasiado largas se consideran un gran inconveniente, así como un cuerpo alargado o sobredimensionado. El pelaje debe ser suave, casi adherido al cuerpo, pero no áspero y, además, no demasiado fino y sedoso al tacto. Finalmente, mira al gatito a los ojos. Si su color no es azul ni azul, entonces este es un gatito con un fuerte defecto congénito en términos de estándares de raza.