Los perros son animales únicos. Según las crónicas antiguas y las investigaciones históricas, fueron ellos los primeros animales que fueron domesticados por el hombre. En el mundo moderno, los perros no son solo mascotas, atrapan a los delincuentes, salvan a las personas en caso de incendios, los encuentran bajo los escombros e incluso tratan enfermedades graves.
En muchas familias, los perros se convierten en miembros de pleno derecho y desempeñan no solo el papel de protector y guardián, sino también de amigo, una criatura cercana. Además, se ha demostrado científicamente que estos animales también son capaces de curar, incluso de dolencias graves.
El método de terapia canina, la llamada canisteroterapia, apareció por primera vez en el extranjero, pero en Rusia su popularidad está ganando impulso. En muchas ciudades ya han aparecido clínicas especializadas, donde, junto con el tratamiento farmacológico, realizan sesiones de curación comunicándose con los perros.
Que es la terapia canina
Las sesiones de canisteroterapia se realizan con perros que han recibido un entrenamiento especializado. En tales clases, las personas enfermas se comunican con los animales, juntos realizan ciertos ejercicios destinados a reducir la manifestación de los síntomas de la enfermedad, deshacerse de una condición estresante que surgió durante un tratamiento prolongado o como resultado de complicaciones.
En la terapia canina, se utilizan representantes de varias razas, que se muestran como compañeros sociables y pacientes. Incluso un perro mestizo que haya dominado con éxito las lecciones de curación es adecuado para la sesión. En las clínicas de esta dirección, puede encontrar un médico mestizo y un "médico" con un excelente pedigrí, un representante de la familia de labradores, perros perdigueros, perros falderos o caniches. Es decir, la raza y el tamaño del animal no son determinantes, solo son importantes su amabilidad y deseo de comunicarse con una persona.
¿Qué enfermedades se tratan con la terapia canina?
La terapia canina se utiliza ampliamente en el tratamiento y adaptación de niños con autismo y síndrome de Down, como tratamiento adicional para diversos trastornos nerviosos, acompañados de confusión y alteración de la coordinación durante el movimiento.
Estos animales también pueden ser excelentes terapeutas para enfermedades del sistema cardiovascular, respiratorio y genitourinario. Varios problemas de las articulaciones como el reumatismo, la gota o la ciática también se pueden tratar con canistoterapia.
Algunas razas tienen su propia especialización médica. Los perros pequeños, como los pinschers, pueden ayudar a aliviar los problemas de coordinación y las discapacidades motoras, y los perros pastores pueden ayudarlos a aprender a caminar nuevamente después de una lesión en la columna o un derrame cerebral. Además, los perros grandes pueden servir como una especie de marcapasos, ya que tienen un ritmo alfa elevado del músculo cardíaco.