¿Planeas tener un gato como mascota? Entonces deberías considerar la posibilidad de castrarlo. De lo contrario, inevitable y rápidamente comenzará a molestarlo y arruinará el entorno de su hogar. Comience con el tipo de gato que tiene, con o sin pedigrí. Si se trata de un animal mestizo, entonces su castración es bastante apropiada. Pero si se trata de un representante de cualquier raza valiosa, en el futuro es posible que desee obtener gatitos de él o simplemente ganar un poco de dinero en su apareamiento. En este caso, la castración, por supuesto, no vale la pena.
¿Qué es la castración para un gato? Se trata de una operación planificada, para la cual la edad óptima del animal es de ocho a nueve meses. La esencia de esta operación es detener el trabajo de los testículos del gato. ¿Por qué es esta la edad óptima? El caso es que en este momento tu mascota ya será un macho prácticamente desarrollado, pero aún no sabe nada sobre la lucha por el territorio, ni sobre el apareamiento.
La castración tiene varios aspectos positivos:
- Tu mascota dejará de comportarse de forma agresiva.
- El comportamiento de su animal no cambiará con la edad, será tan juguetón y obediente como en la niñez.
- La vida útil del gato aumentará significativamente.
- Su gato estará protegido de muchas enfermedades que afectan al sistema genitourinario.
- El gato desaparecerá por completo el deseo sexual y los momentos desagradables asociados para usted (olor desagradable, daño a los muebles, agresividad, tendencia a la vagancia).
Desafortunadamente, tal operación, como cualquier otro procedimiento médico, tiene consecuencias negativas:
- Absceso e infección: esto puede suceder con la inexperiencia o las bajas calificaciones de un veterinario.
- La aparición de enfermedades cardiovasculares graves: esto ocurre con mayor frecuencia con animales viejos o con tal predisposición.
- Complicaciones causadas por la anestesia (una disminución peligrosa de la temperatura corporal, una desaceleración del metabolismo hepático, interrupciones en el trabajo del corazón y los vasos sanguíneos), con intolerancia individual a los medicamentos utilizados para la anestesia.
- Urolitiasis: generalmente se desarrolla cuando la operación se realiza demasiado pronto (el gatito aún tiene un sistema genitourinario defectuoso) o con inactividad física e ingesta insuficiente de agua y alimentos saludables.
- Obesidad: ocurre con un exceso de nutrición (para los gatos castrados, la dieta es un 10-20% más baja que para aquellos que no se han sometido a dicha operación) e inactividad física.
Si, después de considerar todos los pros y contras de la castración de su futura mascota, decide realizarla, entonces necesita conocer los principales métodos de castración:
- Supresión farmacológica de los testículos con la ayuda de productos farmacéuticos: por inyección o en forma de píldora, a su gato se le inyecta un medicamento especial, pero su efecto es temporal (no más de un par de meses).
- La esterilización no es una castración del todo completa, ya que el animal retiene el deseo sexual (con todas las consecuencias que conlleva), pero se vuelve incapaz de tener descendencia.
- La extirpación quirúrgica de los testículos es la operación clásica y más confiable.
- La supresión química del funcionamiento normal de los testículos mediante la irradiación se considera una operación segura, pero aún así todos son conscientes de las posibles consecuencias de recibir grandes dosis de radiación.