Flanders es un conejo flamenco gigante y es una de las razas más antiguas y extendidas del mundo. Se diferencia de sus contrapartes en tamaño: la longitud del cuerpo de este tipo de conejos supera los 65 centímetros, el peso varía entre 6-8 kilogramos y la longitud de las orejas puede alcanzar los 25 centímetros.
Flandes son criaturas lindas, que se asemejan más a cachorros de una raza inusual que a conejos. Su apariencia deleita a muchas personas: pelaje denso y esponjoso, orejas enormes y anchas y patas bastante grandes. Quizás es por eso que estos conejos a menudo se ven como mascotas.
La mayoría de los flandes se crían para el mantenimiento del hogar en los Estados Unidos. Cuidarlos no es muy diferente de cuidar otros tipos de conejos, pero debes entender que estos animales necesitan un área grande. Se puede usar una caja simple como comedero, y el bebedero debe colocarse de manera que el conejo gigante no le dé la vuelta y no se quede sin agua.
Los conejos de la raza Flanders se distinguen por su carácter tranquilo y disposición amable. Pueden llevarse bien con otras mascotas. Los conejos flamencos tratan a los niños con calma, pero no deben quedarse solos, ya que el conejo puede dañar al bebé de forma juguetona.
El alto nivel de inteligencia de flandes te permite entrenarlos o enseñarles trucos sencillos. Este tipo de conejo es capaz de memorizar muchos comandos.
Como todos los conejos, los flandes son muy cariñosos y pueden producir de 8 a 15 conejos por cordero, por lo que debe pensar si necesita tantos bultos esponjosos que rápidamente se conviertan en gigantes, o es mejor limitarse a un conejo sin un par..
Los conejos flamencos pueden contraer enfermedades respiratorias en una corriente de aire, por lo que su jaula debe colocarse en una habitación protegida de la humedad y el viento. Aunque muchos criadores mantienen estos conejos al aire libre, sin afrontar ninguna enfermedad, todo es individual para cada caso.