Los perros pequeños suelen tener problemas dentales. Solo podrás evitarlos con un cuidado constante durante toda la vida de tu mascota. El cepillado es un procedimiento higiénico que mantendrá los dientes de su perro sanos. Es indeseable descuidarlo.
Es necesario
- - pasta de dientes para perros. o polvo de dientes, o pasta de dientes para niños;
- - cotonetes;
- - servilleta
- - aceite de espino amarillo.
Instrucciones
Paso 1
El sarro es una capa amarillenta o marrón que suele aparecer directamente en el borde de las encías. Su aparición es una gran molestia. Las encías están inflamadas, los dientes están flojos. Si se oscurecieron y comenzaron a colapsar, solo un veterinario puede ayudar. El cepillado es un procedimiento sencillo que te permitirá no tener problemas con los dientes de tu mascota en el futuro.
Paso 2
Compre una pasta de dientes especial para "perros". Si no es así, tome talco para bebés o para dientes. No uses pasta de menta.
Paso 3
Lava tus manos. Coloque al perro en su regazo con la espalda hacia abajo. Toma un hisopo. No abras la boca de tu perro, solo cepíllate los labios con los dedos. Ponga un poco de pasta de dientes en un hisopo de algodón y úselo en los dientes de su mascota. Luego, limpie la pasta con un paño húmedo. Si queda una capa amarilla o marrón después del cepillado, es sarro.
Paso 4
Compre un gancho para sarro universal de su dentista. Trátelo con alcohol isopropílico. Cuando el olor desaparezca, retire con cuidado la piedra con un ganchillo. Esto debe hacerse desde la encía hasta el borde del diente. Tenga cuidado de no dañar el esmalte de sus dientes. Retire el exceso de pasta del hisopo de algodón y vuelva a cepillarle los dientes a su mascota. Si las encías están sangrando, y si hay sarro, esto es muy posible, lubríquelas con aceite de espino amarillo. Debe cepillar los dientes de su perro al menos 1 vez por semana.
Paso 5
Si "toychik" se niega rotundamente a limpiar, intente enseñarle gradualmente. Acuéstese boca arriba y toque ligeramente sus dientes con un hisopo de algodón. Deja que el perro se vaya y dale algo sabroso. Poco a poco, tu mascota se irá acostumbrando y te permitirá cepillarle los dientes con calma y lentamente. Durante el procedimiento, hable con él en un tono tranquilo y afectuoso. Para prevenir el sarro, dele a su perro galletas especiales o huesos de bovino. Puedes comprarlos en una tienda de mascotas.