Un gato no castrado puede marcar el territorio y acosar a los dueños con fuertes gritos, por lo que a menudo los dueños de estos animales deciden llevar a su mascota a la clínica veterinaria para que la operen. Para estar seguro de su decisión, primero debe sopesar los pros y los contras.
Desventajas de la castración
La castración es una opción inapropiada cuando se trata de un buen gato de pura raza con un excelente pedigrí. Un animal de clase alta generalmente solo se somete a esta operación después de que se haya obtenido una cantidad suficiente de gatitos. Esto contribuye a la mejora de la raza.
Si confía la operación a un veterinario sin experiencia, la castración puede ser peligrosa. También se debe tener en cuenta que la reacción del animal a la anestesia puede ser “incorrecta”, y esto complicará la situación. Sin embargo, si elige un buen veterinario, se pueden evitar los problemas.
Un gato castrado debe ser cuidado durante al menos un día después de la operación. Por supuesto, este procedimiento es mucho más fácil que la esterilización, por lo que los propietarios tendrán menos problemas, pero aparecerán de todos modos. Debe estar preparado para monitorear al animal cuando se trata de sus sentidos debido a la anestesia. El gato puede vomitar y casi con certeza orinará sin control, por lo que es muy importante que tenga pañales desechables. Debe tenerse en cuenta que después de la anestesia, el animal aún no controla sus acciones: puede levantarse y desaparecer repentinamente y luego caer repentinamente. Es importante asegurarse de que el gato no se lastime.
Después de la cirugía, los gatos a menudo se vuelven menos activos y comen mucho, lo que puede provocar obesidad. Para solucionar este problema, conviene comprar comida especial para animales castrados y jugar con tu mascota más a menudo.
Ventajas de la castración
Después de la castración a una edad temprana, se resuelven muchos problemas hormonales: el gato no deja marcas malolientes en la casa, deja de gritar y aullar fuerte y comienza a tratar a otros animales con más calma en su territorio. En general, el carácter de la mascota puede cambiar para mejor: los gatos castrados a menudo se vuelven menos agresivos e inquietos.
Si su mascota ha intentado huir mucho antes, probablemente dejará de hacerlo ahora. Su vida se volverá más segura y usted se sentirá mejor, ya que no tendrá que cuidar constantemente al animal.
La castración le permite evitar el desarrollo de ciertas enfermedades, incluida la formación de neoplasias en los testículos. En general, según la opinión de los veterinarios, esta operación alarga la vida del animal entre 1,5 y 2 años.
La castración es una salida ideal si un gato no esterilizado vive en la casa, que se planea aparearse con un gato especialmente seleccionado para obtener una buena descendencia.