El adiestramiento del perro no es nada difícil, pero el éxito se logra mediante un adiestramiento regular y, por supuesto, mediante las cualidades psicológicas de una persona. El comando "Voz" comienza a funcionar a una edad temprana. Primero, se le debe enseñar al perro los comandos "Siéntate", "Acuéstate", "Aporta". Luego, refuerzan regularmente las habilidades y, al mismo tiempo, comienzan a enseñarle al perro a hablar.
Instrucciones
Paso 1
Uno de los métodos más efectivos es el adiestramiento de perros para una golosina. Coloca al perro con el comando "Siéntate" frente a ti, dale una golosina. Pero no le des, sino bromea para que el animal lo alcance. Levantando la mano con la golosina hacia arriba, diga el comando "Voz". Mientras sostiene la correa con su pie u otra mano, no permita que el perro se levante. Cuando intenta alcanzar un bocado, por lo general comienza a ladrar. Anímela con "Está bien" y dele la comida.
Paso 2
Puedes enseñarle a un perro el comando de voz usando un objeto. Para hacer esto, primero necesitas jugar con el perro con este objeto, en el momento de fuerte excitación del animal, da la orden "Aport", pero no lances el objeto, sino levántalo lo más alto posible o toma tu mano a un lado. Lo principal es que el perro no puede agarrarlo. Esto la hará ladrar. Confirma con el comando "Voz" y dale un capricho.
Paso 3
A veces, los cachorros ladran cuando ven a un extraño o escuchan un golpe en la puerta. Esto se puede utilizar en el adiestramiento de perros. Si intentas dar la orden "Voz" en el momento del próximo ladrido, y luego animas al cachorro con una cariñosa exclamación "Bien", entonces gradualmente el perro entenderá lo que quiere de él. Este adiestramiento canino es conveniente con un ayudante.
Paso 4
El comando "Voz" se considera completado cuando el perro responde rápidamente en cualquier posición y a cualquier distancia. Por tanto, las clases deben realizarse de forma regular y complicar gradualmente la tarea, cambiando la distancia y la naturaleza de los estímulos. En todo lo que necesita saber cuándo detenerse, de lo contrario el perro ladrará a cada bagatela. El comando de voz se debe dar una vez. La repetición repetida provocará terquedad en el animal.