Es importante que un dueño cariñoso no solo acaricie al gato, sino que también lo sienta en busca de inflamación. Detrás de la capa gruesa, puede encontrar la aparición de conos, un aumento de órganos. Especialmente si el estado general del animal no plantea dudas. El tratamiento de los ganglios linfáticos inflamados en un gato requiere una atención cuidadosa.
Causas y síntomas de inflamación de los ganglios linfáticos
El término linfadenopatía se usa para referirse a los ganglios linfáticos inflamados. La inflamación puede ocurrir debido a una infección y un cáncer.
Si han surgido problemas con los ganglios linfáticos debido a una infección, esta es una enfermedad llamada linfadenitis. Cuando la inflamación comienza en el cuerpo, los ganglios linfáticos adyacentes al órgano afectado a menudo se agrandan. Por ejemplo, si las encías de un gato se ven afectadas, los ganglios linfáticos submandibulares y las amígdalas suelen agrandarse.
Además, las causas pueden ser virus, microbios y parásitos (gusanos). En este caso, el objetivo del tratamiento es la destrucción.
Se produce un aumento único o apareado en trastornos metabólicos, disminución de la inmunidad y lesiones.
Si los ganglios linfáticos del animal están enormemente agrandados, entonces debe donar sangre. Con leucosarcoma y leucemia, puede haber tales síntomas, pero sin pruebas, estas enfermedades no se reconocen de ninguna manera.
Otros síntomas dependen del órgano o la parte del cuerpo en la que se desarrolla la enfermedad. Un dolor de garganta puede hacer que un gato sea reacio a comer, toser y babear. Algunos de estos signos pueden deberse a la inflamación de los ganglios linfáticos, ya que interfieren con la deglución.
En caso de que las patas del gato estén infectadas, habrá un aumento de los ganglios linfáticos a lo largo de las patas del animal. Puede aparecer cojera. Además, la razón de esto no será tanto dolor en las extremidades como una reacción dolorosa de los ganglios linfáticos inflamados.
La linfadenitis generalmente no es dañina para los gatos. Naturalmente, sujeto a detección y tratamiento oportunos. Cuando la enfermedad se cura, los ganglios linfáticos vuelven a su estado normal.
Tratamiento de la linfadenitis en gatos
Puede elegir un tratamiento efectivo solo estableciendo la causa exacta de la enfermedad. Por tanto, lo primero que debe hacer es realizar el diagnóstico correcto. Para hacer esto, debe comunicarse con una clínica veterinaria.
Si la infección es de naturaleza bacteriana, se prescriben antibióticos, a los que este tipo de bacterias es sensible. Si el agrandamiento de los ganglios linfáticos es causado por una infección por hongos, se usan medicamentos antimicóticos.
Con una infección viral, el tratamiento debe ser recetado por un médico. La elección del fármaco está influenciada por la condición y los patógenos de la inflamación. La mayoría de las veces es bruneomecina.
Cuando la condición del animal empeora (dificultad para respirar, fiebre y apatía), se prescriben hormonas.