Los gatos, como los humanos, pueden estar de mal humor e incluso molestarse. Muy a menudo, el miedo al medio ambiente conduce a la manifestación de ira. Para pacificar a un gato en tal situación, debes comportarte de cierta manera.
Determina la razón
Una de las causas más comunes de miedo y posterior enfado en los gatos es la aparición de extraños. Los gatos simplemente no saben qué esperar de ellos, si no notan una actitud benévola hacia ellos mismos. Una vez asustados de una persona, los gatos posteriores pueden tener miedo y mostrar agresión hacia otras personas aparentemente similares. Otra causa bastante común de agresión felina es la enfermedad. Cualquier malestar que experimente un animal (dolor de muelas, un absceso en la piel, pequeñas heridas, etc.) puede provocar un comportamiento agresivo hacia los animales y las personas que lo rodean. Antes de intentar domesticar a tu gato, determina si está realmente enojado o simplemente muestra miedo. La línea entre estos estados en los gatos es delgada; pueden transformarse entre sí en unos pocos segundos. Una manifestación vívida de comportamiento agresivo es una espalda arqueada hacia arriba.
Tómate tu tiempo y ten cuidado
Un ataque de un gato cabreado puede provocar lesiones bastante graves en forma de arañazos y mordeduras profundas. Dale tiempo y espacio para que se calme, no trates de cuidarlo, acariciarlo o abrazarlo. Elimine la fuente de irritación, podría ser otro gato, un extraño u otra cosa. Tan pronto como desaparezcan las manifestaciones externas de ira, suba lentamente y extiéndase hacia él. Si el gato comienza a silbar o arquear la espalda, significa que aún no se ha calmado y necesita más tiempo. Mantén la calma y no hagas movimientos bruscos, esto puede asustar al gato. Permanezca relativamente tranquilo durante varias horas.
Distrae al gato
Una buena forma de distraer a un gato enojado de las fuentes de irritación es alimentarlo. Dale su comida favorita, en la mayoría de los casos esto es suficiente para que el gato se calme por completo. Si tienes varios gatos viviendo en tu casa que están constantemente en guerra entre sí, es posible que debas aislarlos entre sí. Si la fuente del miedo del gato es una persona específica que viene a visitarte, encierra al gato en una habitación separada durante su visita. En cualquier caso, no intentes regañar al gato ni aplicarle presión física, el resultado casi siempre será cero.