Quienes se preocupan por la seguridad de su mascota prefieren pasear al gato de tal forma que sus movimientos estén bajo control.
No todos los propietarios que tienen un gato en casa lo liberan incontrolablemente a la calle. Si el gato rara vez sale del apartamento, será más seguro y más conveniente para él si los dueños lo llevan a caminar con un equipo especial para caminar: un collar, un arnés, una correa.
Un gato con correa es bastante común. Muchos propietarios, que se preocupan por la seguridad de su mascota, salen a pasear sin falta con correa y arnés. Esto garantiza la seguridad del gato y la tranquilidad del propietario.
Las correas y arneses para gatos están disponibles en abundancia en cualquier tienda de artículos para mascotas. Los modelos más adecuados son los fabricados con cinta elástica de nailon. El material debe ser lo más ligero posible, puede ser algodón o nailon. Al elegir una correa, se debe tener en cuenta el peso: los gatos son muy sensibles e incluso las estructuras livianas pueden causarles molestias.
¿Por qué un gato necesita una correa?
No todos los gatos responderán a la llamada de sus dueños, y mucho menos seguirán las órdenes expresadas por ellos. Un gato que sale a pasear suele correr a explorar el territorio o se esconde en los arbustos cercanos, de donde será bastante problemático recuperarlo. Para mantener al animal bajo control, la mejor forma es utilizar un arnés y una correa especiales.
La correa servirá como garantía de que el gato no se meterá debajo del coche, no se perderá y no se perderá. Lo utilizan cuando se desplazan, visitan una clínica veterinaria, cuando viajan en transporte público y privado.