La fauna del planeta Tierra es única y diversa. Entre las diversas especies de animales, existen individuos que pueden asombrar la imaginación con su apariencia y estructura corporal. Uno de estos representantes del mundo animal son los osos hormigueros.
El oso hormiguero pertenece a la categoría de animales del planeta, cuyo alimento son las hormigas. Por lo tanto, este tipo de bestia recibió ese nombre. Los osos hormigueros tienen un cuerpo alargado con un hocico y una cola largos. Cabe señalar que la cola mide la mitad de la longitud del cuerpo del oso hormiguero. Los propios animales pueden alcanzar tamaños impresionantes. Su longitud desde la nariz hasta la punta de la cola puede ser de más de dos metros y pesar 40 kilogramos (oso hormiguero gigante). Sin embargo, también hay individuos más pequeños: osos hormigueros enanos.
Los animales se caracterizan por la presencia de una boca estrecha y una lengua larga, que tiene una gran cantidad de espinas en su composición, lo que les permite obtener alimento.
La extracción de hormigas suele ocurrir de la siguiente manera: el oso hormiguero intenta romper la vivienda de las hormigas con sus patas delanteras, y luego, gracias a su lengua larga, consigue insectos que se pegan a la superficie de la lengua. Lo más interesante es el hecho de que los osos hormigueros no tienen dientes. En el área del estómago, tienen crecimientos en forma de cuernos, que proporcionan la molienda de los alimentos.
La búsqueda de presas se realiza únicamente por las fosas nasales, y no por las visuales, ya que el animal tiene por naturaleza una visión y audición poco desarrolladas. Por naturaleza, los osos hormigueros son muy amables y tranquilos, por lo que pueden ser acariciados sin miedo. Pero debes tener cuidado con sus patas, ya que la longitud de las garras alcanza hasta los 5 centímetros, y durante el juego los osos hormigueros pueden no controlar sus extremidades y causar lesiones.
Algunas especies de osos hormigueros viven en los árboles, por lo que se alimentan de hormigas arborícolas.
Los animales en su entorno natural se pueden encontrar en África, América del Sur, Australia y Oceanía.