Muy a menudo, la salamandra se asocia con el fuego. En muchos mitos, se menciona a este legendario anfibio de cola. En la mitología griega, se creía que la salamandra, al pasar por el fuego, lo apaga y al mismo tiempo no se quema. Los cristianos creían que la salamandra es un mensajero del infierno. Salamandra, traducido del persa, significa "fuego dentro".
Habitat
Las salamandras viven en América del Norte, el oeste de Ucrania y Asia Menor. El anfibio prefiere los bosques húmedos mixtos y caducifolios, colinas, prados y claros. Una condición importante para que viva la salamandra es la humedad. En las horas calurosas, las personas viven bajo piedras y árboles caídos. El clima seco daña el cuerpo de las salamandras y puede provocar la muerte. Un lugar favorito de los anfibios son los lugares oscuros y húmedos. La caza de individuos se realiza de noche o al anochecer. Las salamandras se alimentan principalmente de lombrices extraídas del suelo. Además, los anfibios pueden cazar insectos grandes como arañas y mariposas. El anfibio atrapa a sus presas lanzándolas hacia adelante con todo el cuerpo. La salamandra luego se traga su presa entera.
Veneno de salamandra
Todas las salamandras están dotadas de una sustancia venenosa especial. Los químicos lo llamaron salamandrina. El veneno es producido por las glándulas parótidas de las paratidas. Es bastante viscoso, con un olor que recuerda algo a ajo o almendras. Este veneno es muy tóxico. Durante la caza, la salamandra no usa veneno. Es necesario para los anfibios únicamente para su protección. Cuando existe un riesgo para la vida, la salamandra puede rociar veneno a una distancia de más de un metro. Una sustancia tóxica, que ingresa al cuerpo del enemigo, causa insuficiencia respiratoria grave, parálisis parcial, arritmia, convulsiones. Para un animal, el veneno es necesario no solo para protegerse de los depredadores, sino también para la desinfección, ya que tiene efectos antifúngicos y antibacterianos. El veneno de salamandra pertenece a un grupo de neurotoxinas.
En las estribaciones de los Cárpatos, se encuentra uno de los representantes más venenosos de las salamandras: el tritón negro alpino. Sus dimensiones son bastante pequeñas, de unos 10 cm, y se mueve bastante lentamente. Las glándulas del animal secretan un secreto que provoca graves quemaduras al entrar en contacto con las mucosas de los ojos o la boca.
La salamandra manchada se considera un anfibio condicionalmente venenoso, ya que no tiene la capacidad de introducir veneno en la sangre. El veneno no puede actuar a través de la piel. Por lo tanto, si el animal no se toma en la mano, no puede causar un daño significativo. El veneno, que golpea las membranas mucosas de una persona, causa una sensación de ardor.
Las salamandras viven unos 25 años. La salamandra de fuego está dotada de un color negro y amarillo brillante. El tamaño del cuerpo puede alcanzar los 30 centímetros con la cola. Una coloración tan brillante sirve de advertencia a los enemigos.