Muy a menudo, los dueños de gatos se desesperan tratando de destetar a sus mascotas del hábito de marcar territorios. Como regla general, los gatos comienzan a marcar su territorio por varias razones: al gato no le gusta el relleno en su caja de arena o ya se ha vuelto inutilizable, alguien de afuera está invadiendo su territorio.
Instrucciones
Paso 1
Para destetar a un gato de este hábito, no debes gritarle ni golpearlo con zapatillas y meter la nariz en un charco. Lo más probable es que el gato entienda tus acciones todo lo contrario: si mete la nariz en un charco, aquí es donde debes marcar.
Paso 2
En la naturaleza, no todos los gatos de la familia marcan el territorio, sino solo el gato principal. Dado que existe una estricta jerarquía en las familias felinas, y los gatos más jóvenes no se atreven a marcar el territorio del líder, esto será considerado una rebelión y severamente castigado. En consecuencia, en el apartamento debes dejarle claro al gato que él no es el gato principal aquí, sino tú.
Paso 3
Si descubre a un gato haciendo esta actividad inapropiada, tendrá que tomar medidas drásticas. En primer lugar, levante a su bromista por la nuca. El gato seguramente sujetará su cola y asumirá la pose de un gatito pequeño. Definitivamente comenzará a romperse, así que trata de abrazarlo lo más fuerte posible.
Paso 4
Ahora tienes que encender tu imaginación y hacer tres cosas. Primero, necesitas silbar como un gato. Para hacer esto, debe practicar con anticipación para que resulte lo más creíble posible. En segundo lugar, debes golpear al gato en la cara como lo hacen los gatos durante sus peleas. Las observaciones también son útiles para hacer esto. Y en tercer lugar, debes enojarte e imaginarte a ti mismo como el gato principal, al que quieren sacar del trono.
Paso 5
Las tres acciones deben realizarse al mismo tiempo. Simplemente no golpees al gato con demasiada fuerza, ¡mide tu fuerza! Defiende tu territorio hasta que el gato comience a darse la vuelta y chillar. Solo entonces ganarás. Recuerde que el principio de lo salvaje está en juego aquí: el que primero mire hacia otro lado, perderá. Por lo tanto, intente mirar al gato directamente a los ojos y preferiblemente más de cerca.
Paso 6
Después de que el gato se rinda, debes lavar inmediatamente sus etiquetas y poner las tuyas. Por supuesto, no es necesario que haga esto de la misma manera que el gato. Simplemente limpie el área con algo que huela a usted, como calcetines gastados, una camiseta sudada o un perfume que use con frecuencia.
Paso 7
Lo más probable es que estas lecciones tengan que repetirse varias veces. Pero entonces el gato comenzará a percibirte como un gato principal muy grande y ya no se atreverá a marcar el territorio del dueño, sino que se comportará como un miembro obediente del clan felino.