El cangrejo herradura es el animal marino más antiguo que vivió en las profundidades del mar hace más de 450 millones de años. Este artrópodo recibe su interesante nombre de su cola larga y puntiaguda ubicada en la parte posterior del cuerpo.
Los representantes modernos del cangrejo herradura no son diferentes de los representantes de esta especie que vivieron hace varios millones de años. Casi todo su cuerpo está formado por un caparazón denso que esconde el cefalotórax, la única excepción es una cola larga en forma de espina larga. En este caso, el cefalotórax tiene dos ojos medios simples y dos complejos: laterales.
Este "fósil viviente" no tiene dientes, las extremidades anteriores, que están agrupadas alrededor de la boca cortada, sirven como reemplazo. Con estas extremidades, el cangrejo herradura rompe la comida y se la traga. El resto de las extremidades, seis pares en total, se ubican en el abdomen y sirven para el movimiento y la respiración (piernas branquiales). La cola sirve como timón, controlando el movimiento y una especie de lastre que mantiene a este artrópodo en la posición corporal óptima para él.
Un dato interesante es que la hemolinfa (sangre) del cangrejo herradura es azul. Esto se debe a la presencia de un pigmento específico, la hemocianina, que asegura la saturación del cuerpo del cangrejo herradura con oxígeno.
Los cangrejos herradura se reproducen poniendo huevos, alcanzando la edad de 10 años. Durante el desove, la hembra se arrastra fuera del agua hacia la orilla (este hecho hace que los científicos asuman que en la antigüedad los cangrejos herradura podían ser un animal que vivía en la tierra) y deposita hasta 1000 huevos en la arena, que el macho fertiliza. A partir de los huevos fertilizados, aparecen por primera vez larvas (con órganos internos subdesarrollados) de unos 4 cm de tamaño, que después de una semana se convierten en individuos completamente adultos.
Los cangrejos herradura modernos viven hasta 30 años, alcanzando una longitud de hasta 90 cm, que es mucho más alta que el crecimiento de sus antepasados que vivían en el período Paleozoico (su longitud era de hasta 3 cm). Cuatro especies de este artrópodo han sobrevivido hasta el día de hoy, comunes frente a las costas del sudeste asiático (India, Indonesia, Filipinas, Vietnam, China, Japón), el Golfo de México de América del Norte, en las aguas del Atlántico.