Los dispositivos de iluminación modernos pueden resolver el problema de la iluminación de cualquier tipo de acuario, independientemente del tipo de sus habitantes. Además de realizar una función decorativa, las lámparas en el acuario marcan la pauta para la vida normal de plantas, animales y microorganismos acuáticos, que aseguran el procesamiento de sustancias orgánicas acumuladas en el agua.
Instrucciones
Paso 1
En la mayoría de los casos, las lámparas fluorescentes se utilizan para iluminar los acuarios. Las bombillas incandescentes rara vez se instalan en estos días, ya que la mayor parte de su energía se convierte en calor. Las lámparas fluorescentes son económicas, sirven durante mucho tiempo y dan un buen flujo de luz. El único inconveniente es la necesidad de utilizar un balasto electrónico o estrangulador para conectarlos a la red.
Paso 2
Desde el punto de vista del soporte del acuario, las lámparas fluorescentes tienen dos indicadores principales: color y potencia. El primero refleja el espectro de colores de la lámpara, el segundo se expresa en vatios. En cuanto a potencia, los dispositivos de iluminación son de 56, 40, 30, 25, 20 (18), 15 y 8 vatios. Cada uno de los indicadores de potencia corresponde a una determinada longitud de lámpara: 120, 105, 90, 75, 60, 45, 20 cm, respectivamente. Por eso, cuando vaya a comprar un sistema de iluminación, mida la longitud del acuario.
Paso 3
Calcula la potencia de tu acuario. Para un recipiente con una altura de columna de agua de 45 cm o menos, tome una lámpara con una potencia de 0,5 W por litro. Esto le dará una iluminación media que es adecuada para la mayoría de las plantas. Si el acuario mide más de 50 cm, se debe duplicar la potencia de las lámparas.
Paso 4
También debe tenerse en cuenta que no toda la luz que emana de la lámpara ingresa al acuario, sino que parte hacia arriba y hacia los lados. Para minimizar la pérdida de luz, opte por lámparas con reflector especial que pueden ahorrar hasta un 95% de la luz.
Paso 5
Preste atención al color de la lámpara. La clorofila absorbe la luz de manera desigual: en la región rojo-naranja del espectro (660 nm), en la violeta-azul (470 nm), y en la primera es el doble de intensa. Por lo tanto, las plantas necesitan luz roja y azul (menos). La luz con diferentes características espectrales puede no gustarle a las plantas y estimular su crecimiento.
Paso 6
Actualmente se encuentran a la venta lámparas blancas y de luz diurna de diferente potencia. Una lámpara de luz blanca (LB) en su espectro coincide con la región de absorción de la clorofila, por lo que es ampliamente utilizada por los acuaristas. Una lámpara fluorescente tiene mucha área azul-azul, por lo que no es adecuada para un acuario.
Paso 7
Vale la pena señalar varias variedades de lámparas de acuario especializadas. Las lámparas marcadas con Aqua-Glo tienen un espectro especialmente seleccionado para igualar el espectro de absorción de la clorofila lo más cerca posible. Sus colores claros son colores amarillo, naranja, rojo, azul y azul bien en los peces.
Paso 8
Sun-Glo es similar en espectro a una bombilla de luz blanca, pero más equilibrada. La fuente de luz Power-Glo contiene parte de la luz azul en su espectro. Este potente sistema de luz se puede utilizar en acuarios sin plantas o acuarios de agua salada. Si hay plantas, esta lámpara debe combinarse con Aqua- o Flora-Glo, especialmente diseñada para acuarios con plantas.