El gato Tonkin es un híbrido de gatos birmanos y siameses. Su segundo nombre es "Siamés dorado". Los antepasados de este gato provienen del sudeste asiático: los europeos alguna vez llamaron Tonkin a las regiones del norte de Vietnam.
La aparición del gato Tonkin
Los primeros en interesarse por esta raza fueron los especialistas canadienses, que a mediados del siglo XX trabajaron mucho en la cría de tonquinesis. Sin embargo, los estándares de la raza solo se aprobaron en 1984. Primero fueron aprobados por criadores estadounidenses y luego británicos.
Los genes de los antepasados birmanos determinan la forma del cuerpo de este gato, pero heredó la gracia de los siameses. El gato Tonkin es relativamente pequeño y musculoso. Tiene la espalda ligeramente arqueada y el pecho desarrollado. El cuello de este animal es muy elegante y el lomo bastante ancho. Las patas de los gatos Tonkin son delgadas, con músculos pronunciados, y las patas traseras son más largas en relación con las delanteras. Los dedos de los pies son cortos y prolijos. La cola larga y elástica se estrecha algo hacia el final.
La tonquinesis se distingue por un cabello grueso, liso y suave de un tono dorado. Puede ser muy corto o mediano, pero debe estar firmemente adherido a la piel. Su especial sutileza y brillo saludable confieren a la apariencia del gato una nobleza excepcional. Los gatitos tienen un pelaje ligero, pero con la edad se oscurece gradualmente. Actualmente, el estándar de la raza prevé 12 variedades de color. Una característica interesante de la raza es que el color del animal puede cambiar según el clima. Cuanto más frío hace afuera, más oscuro se vuelve el pelaje del gato Tonkin.
El cráneo de Tonkinesis es más angular que el del antepasado siamés, pero no tan puntiagudo. La barbilla es pronunciada, las mejillas son redondas. Las orejas son de tamaño mediano, ligeramente redondeadas, bien separadas. Los ojos no son demasiado grandes, colocados en ángulo. Su tono puede variar de azul brillante a ligeramente verdoso. Los ojos inusuales que cambian de color según la iluminación son una especie de "tarjeta de presentación" de la raza.
La personalidad del gato Tonkin
Los gatos Tonkin se distinguen por su tranquilidad y sociabilidad; son especialmente cariñosos con los niños. Tonkinesis heredó las características más atractivas de sus extraordinarios antepasados. La curiosidad es peculiar de ellos, y sus agudos mentes han sido notados por los criadores durante mucho tiempo. Estos graciosos animales suelen acompañar a sus dueños durante los paseos, ya que no les gusta la soledad y la correa no les molesta en absoluto.
Otra ventaja de la tonquinesis es su fuerte inmunidad y, como resultado, su longevidad. Cuidar a estos animales es bastante sencillo, lo único que los gatos Tonkin necesitan con urgencia es el amor de sus dueños.