La mastitis es una enfermedad asociada con la inflamación de la mama. No solo las mujeres, sino también los gatos lactantes lo enfrentan. Hay varias razones para la aparición de mastitis. Esta enfermedad de las mamas puede afectar la salud tanto de la gata como de sus gatitos.
Causas de la mastitis
Entonces, a menudo esta enfermedad ocurre debido a:
• hipotermia del animal;
• hematomas y lesiones de la mama;
• infección con microflora fúngica o bacteriana a través de grietas en los pezones;
• destete temprano de los gatitos o lactancia abundante, que provocan el estancamiento de la leche en la glándula mamaria;
• predisposición hereditaria.
Los síntomas de la mastitis
Para asegurarse de que su gato esté enfermo de mastitis, debe prestar atención a los síntomas. Si al presionar el pezón se libera un líquido purulento, acuoso o maloliente (blanco, verdoso, marrón o marrón), su animal necesita ayuda.
Si el estado general de una gata lactante ha empeorado (está deprimida o su temperatura corporal está elevada), esto puede ser otro signo de mastitis.
Si la mascota lame el área de las glándulas mamarias todo el tiempo, esto también puede ser una señal de acción.
Tratamiento de mastitis
Debe recordarse que debe ser tratado de manera oportuna. La mastitis es un proceso inflamatorio que se desarrolla muy rápidamente. Para prevenir complicaciones graves con graves consecuencias, se recomienda consultar a un especialista. Su médico le recetará antibióticos, antipiréticos, medicamentos antiinflamatorios y medicamentos que disminuyen la producción de leche.
En la primera etapa de la enfermedad, el médico recomendará que el gato descanse por completo. Si es posible, intente aislar temporalmente a los gatitos de ella y transferirlos a la alimentación con biberón. El primer día, elimine y luego limite por completo el consumo de alcohol. Vuelva a vendar el seno para prevenir infecciones adicionales. Enjuagar periódicamente los pezones con infusión de hojas de salvia o una decocción de corteza de roble.
La temperatura de las compresas no debe ser superior a 40 ° C.
En caso de complicaciones, p. Ej. cuando se producen flemones o abscesos, se utiliza un tratamiento quirúrgico: saneamiento de cavidades, drenaje o apertura.
Profilaxis
La alimentación adecuada de la mascota, el cuidado higiénico de los pezones durante el embarazo y después del parto ayudarán a evitar la enfermedad. También debe proporcionar al gato condiciones de vida normales y llevarlo a un veterinario para que lo examine de manera oportuna. Si nota raspaduras o grietas en las glándulas mamarias, trate las heridas con una solución débil de permanganato de potasio.
Lo más importante es no intentar curar al animal tú mismo. Sin un examen profesional, así como la atención médica oportuna, la enfermedad puede adquirir un carácter gangrenoso.