Entre las especies únicas de primates, se pueden distinguir los diminutos habitantes de Filipinas, que se llaman tarseros. Estas inusuales criaturas viven en Filipinas, Sumatra, Kalimantan y Sulawesi.
El tarsero es un pequeño primate que vive en la zona boscosa de algunas islas de Filipinas. Tiene un aspecto característico inherente a toda la familia. Se cree que los tarseros pertenecen a la familia de los tarseros. Los tobillos desproporcionadamente largos indican la identidad de los mamíferos. Los tarseros viven en los árboles.
La apariencia de estos bebés es muy peculiar. Los animales tienen ojos amarillos enormes y saltones que pueden brillar en la oscuridad. A veces, los tarseros tienen ojos rojos o verdes. La cabeza y el torso son pequeños, redondos y anchos. Tienen dedos y manos bien desarrollados. El pelaje es gris o marrón y la cola es fina y lampiña. Aunque los tarseros tienen muchas similitudes con los monos, algunos argumentan que pertenecen a la familia de los lémures. Los tarseros crecen hasta solo seis pulgadas de tamaño. Estos son monos muy pequeños, su peso puede alcanzar solo 160 g.
Estos animales se adhieren a comer insectos. Ocasionalmente, pueden comer alimentos más grandes, como pájaros pequeños. Algunos investigadores que mantienen a los tarseros en cautiverio señalan que pueden comer mariscos como los camarones.
Los tarseros están amenazados de extinción. Debido a la tradición previa de capturar tarseros y hacer peluches para la venta, así como a la disminución del hábitat, la población ha disminuido significativamente. Ahora esta tradición está prohibida y los animales mismos están bajo la protección de la ley.