Si trajiste un gatito a casa y quieres que se convierta en tu amigo para toda la vida, debes recordar y seguir algunas reglas simples.
1. ¡Respeta a tu gato! Trate a su mascota como una persona desde el principio. No interfiera con el gato en sus movimientos por el apartamento: debe explorar su territorio, olfatear y conocer cada rincón para sentirse absolutamente cómodo. Nunca despiertes a un gato dormido, no lo toques mientras duerme, esta es la ley.
2. Olvídese del concepto mismo de "apretar" a un gato. La ternura irreprimible a menudo lleva al hecho de que los dueños acarician, sacuden a la bestia contra su voluntad, restringen sus movimientos … ¿Qué hará el gato la próxima vez que vea a su "gentil torturador"? ¡Por supuesto, ella intentará huir y esconderse!
3. Castigue al gato solo como último recurso, por ejemplo, si hizo un charco en el lugar equivocado. Y recuerde que si golpea a su mascota, perderá para siempre su amistad y confianza. Para que el gato entienda que ha sido castigado, basta con colocarlo junto a la "escena del crimen", agarrarlo con fuerza por la nuca y decir estrictamente varias veces "no, malo", mientras lo llama por su nombre..
4. Existe una forma muy sencilla y eficaz de dejarle claro al animal que eres su amigo. Necesitas sentarte frente a la bestia, atrapar su mirada, mirarla a los ojos por solo un par de segundos, y luego, sin mirar hacia otro lado, entrecerrar los ojos lentamente, casi cerrarlos y pasar varios minutos en tal visual " diálogo". Haz este ejercicio todos los días 2-3 veces, y verás cuánto fortalecerá tu amistad con el gato.
5. Explíqueles a sus hijos las reglas de manejo de un gato, enséñeles a jugar correctamente con un animal, sin burlarse, ofender o causar incomodidad. Tome un control estricto de la relación entre los niños y el animal, y si nota algún problema, ¡tome medidas estrictas de inmediato!