A los gatos no les gustan mucho los viajes. Sin embargo, a veces se hace necesario transportarlos. Transportar un animal en un avión es estresante tanto para el gato como para el dueño. Trate de tener en cuenta todas las pequeñas cosas para que en el último momento no tenga que cancelar el viaje.
Es necesario
- - dinero para pagar el vuelo;
- - bolsa de transporte;
- - ropa de cama impermeable en la bolsa;
- - pasaporte veterinario.
Instrucciones
Paso 1
Incluso cuando compre un boleto, informe a los representantes de la aerolínea que planea llevar un gato con usted. El acuerdo es necesario, ya que hay un límite en el número posible de animales en la cabina. Verifique los requisitos para el animal transportado y su jaula; difieren de un transportista a otro.
Paso 2
Por lo general, se permite que los gatos entren en la cabina del avión sin ningún problema. Sin embargo, algunas empresas imponen restricciones sobre el peso del animal: un animal que pese más de seis kilogramos solo puede volar en el maletero. Este es un estrés no deseado para el gato. Por lo tanto, busque una aerolínea que vuele en la ruta que necesita y esté dispuesta a llevar un gato bien alimentado a la cabina.
Paso 3
Elija una bolsa para llevar a su mascota. Debe ser de un material denso, tener un fondo impermeable y la suma de las medidas de largo, ancho y alto no debe exceder los 120 cm. La bolsa debe caber fácilmente debajo del asiento de un avión.
Paso 4
Verifique el pasaporte veterinario del animal; debe estar marcado con vacunas, certificado por el sello del veterinario. El pasaporte se presenta en el aeropuerto al emitir una tarjeta de embarque.
Paso 5
No alimente a su mascota durante varias horas antes de volar. Si el gato está nervioso, dele un sedante felino suave como Cat Bayun. Para medicamentos más fuertes, solo un veterinario puede recomendar. Coloque un material absorbente, como un pañal de bebé, en la parte inferior del portabebé. No intente meter la caja de arena en su bolsa, solo se interpondrá en su camino.
Paso 6
Si no tiene su propio automóvil, llame a un taxi al aeropuerto; un viaje con un animal nervioso en el transporte público será un estrés adicional tanto para el animal como para usted.
Paso 7
En el aeropuerto, diríjase al mostrador de facturación. Lo más probable es que lo remitan para un control veterinario y se le solicite un recargo por exceso de equipaje. El gato se pesará junto con la jaula. Si es posible, pida sentarse para que haya una silla vacía al lado; allí puede colocar un transportador con un animal.
Paso 8
Quédese en su bolso mientras vuela. Puede liberarse y huir, y llevará mucho tiempo buscarlo en la cabina. Puedes poner tu mano al gato dentro de la jaula, el contacto con el dueño lo calmará.
Paso 9
Cuando llegues a tu destino, no olvides alimentar y dar de beber al gato. Para un vuelo largo, esto tendrá que hacerse mientras aún está en el aire.