Solo unos pocos animales en el mundo son capaces de deambular. En tal modo de andar, el animal camina simultáneamente con sus patas traseras izquierda y delantera, y luego con sus patas delanteras y traseras derechas. Así caminan camellos, jirafas y gatos domésticos. Además, este último paso solo en los dedos. Por lo tanto, se mueven casi en silencio e imperceptiblemente hacia los demás. ¿Qué otros toques distinguen las características fisiológicas del andar de un gato?
Instrucciones
Paso 1
Un gato doméstico tiene cinco dedos en sus patas delanteras. El quinto de ellos, a su vez, está muy acortado. Tanto es así que no toca el suelo al caminar. Las patas traseras del gato mientras camina enfatizan los cuatro dedos, y no hay ninguna grande en las patas traseras. La planta de las patas del gato es bastante gruesa. Distribuye el peso de su cuerpo por completo sobre todo el volumen del pie. Por eso el paso del gato es tan silencioso.
Paso 2
El hecho de que haya una almohada de lana en las plantas de sus patas también ayuda a los gatos a perseguir imperceptiblemente su objetivo (presa). Y el gato esconde sus garras en pliegues de piel y las suelta cuando lo necesita. A diferencia de sus garras, las garras del perro siempre se sueltan, por lo que el dueño escucha el acercamiento de esta mascota hacia él. Es casi imposible escuchar el acercamiento de un gato.
Paso 3
El andar de todos los gatos es elegante, flexible, nadando, como de puntillas. Caminan en línea recta, como si estuvieran delineados a lo largo de una regla. El gato corre en zigzag si quiere jugar o divertirse de esta forma por su cuenta.
Paso 4
Si observa de cerca el paso de un gato mientras camina lentamente, notará que la parte posterior del gato se mueve como el frente. La única diferencia es que si la pata delantera de la pierna derecha se adelanta, la izquierda se coloca hacia atrás. De ahí que se dé la impresión de que el gato camina a lo largo de una línea.
Paso 5
Esta mascota puede caminar a un trote pausado, un simple paso felino, en caso de peligro, al galope o al galope prolongado. Si el gato caminaba a un ritmo moderado en la nieve, puede ver detrás de él una línea uniforme de huellas de zorros. Si el gato caminaba al trote, entonces puede ver que casi con la misma claridad cae en la pista de su frente con su pata trasera.