La diarrea o diarrea en un perro, junto con el envenenamiento, son las razones más comunes por las que los dueños de mascotas acuden a los veterinarios. Las formas leves de malestar intestinal en su mascota se pueden curar por sí solas.
Causas de la diarrea de un perro
Las causas más comunes de malestar intestinal en un perro son:
- intoxicación con alimentos, medicinas y venenos caducados o en mal estado;
- infecciones virales agudas (enteritis, hepatitis, peste y otras);
- enfermedades del hígado y páncreas;
- invasiones de protozoos y helmintos;
- pienso no digerible;
- disbiosis.
La fase aguda de la diarrea en un perro con heces líquidas puede durar hasta dos semanas. Otros síntomas negativos (fiebre, letargo, vómitos, negativa total a comer), si acompañan a la diarrea, deben alertar a los propietarios y convertirse en motivo de contacto con la clínica veterinaria.
Si su perro tiene diarrea constante cuando se le alimenta correctamente con alimentos frescos, podría ser una enfermedad crónica grave. La pancreatitis y otras patologías del páncreas pueden desarrollarse gradualmente debido a una dieta mal seleccionada. Alimentar a un perro de la mesa de una persona y complacer sus caprichos gastronómicos a menudo termina mal para el animal.
Que hacer si tu perro tiene diarrea
Si un perro tiene diarrea una vez y el animal se comporta normalmente, no hay motivo de preocupación. En este caso, lo más probable es que la diarrea sea causada por imprecisiones en la nutrición (comer en exceso o alimentos grasos).
La diarrea en las razas de perros pequeños que dura más de 24 horas puede provocar deshidratación. La diarrea es peligrosa para Shar-Pei, Yorkshire Terriers, Pequinés, Dachshunds, Chihuahuas, Bulldogs franceses, etc. Para restablecer el equilibrio hídrico, el perro necesita medicamentos de rehidratación y adsorbentes para neutralizar las toxinas.
Además, todas las razas de perros con diarrea deben recibir medicamentos con bifidobacterias para mejorar los intestinos. Y es muy importante darle a beber agua fresca a su mascota, incluso si el perro se niega a beber por sí mismo.
Si el primer día de diarrea el perro se niega a comer, no es necesario que lo fuerce. Luego, puede alimentar a su mascota con productos lácteos fermentados bajos en grasa y arroz hervido en caldo de pollo. Después de 2 días, si las heces del perro aún están líquidas, muéstrelo al veterinario.
Con diarrea con sangre, no necesita esperar, debe llevar urgentemente a su mascota al médico. Un síntoma tan alarmante se puede observar con leptospirosis, salmonelosis, enteritis y rabia atípica. Además, la sangre en las heces líquidas puede aparecer por daño en el intestino por un fragmento de hueso u otro objeto que el perro haya tragado con la comida. Esta es también una razón para contactar a un veterinario.