El contacto es una comunicación eficaz y cómoda entre el perro y su dueño, cuando experimentan el placer de la comunicación y cualquier interacción entre ellos. Sin contacto, es difícil no solo entrenar a un cachorro, sino también vivir con él en el mismo territorio. Pero, ¿qué hay que hacer para que aparezca el contacto?
Antes de empezar a adiestrar a un cachorro, es importante que el dueño se dé cuenta de que, aunque es peludo, sigue siendo una persona con temperamento y carácter propio. El paradigma “amo - domina, perro - obedece” está irremediablemente obsoleto, dando paso al respeto mutuo y al entrenamiento sin conflictos. Por tanto, es importante que exista contacto entre el cachorro y el dueño.
Desarrollar el contacto con el cachorro
Una persona y un perro no podrán comunicarse e interactuar bien si no se establece contacto entre ellos. Pero, ¿qué hay que hacer para que aparezca? Deben observarse las siguientes reglas:
- Habla con el cachorro tanto como puedas. Los perros pueden memorizar decenas de palabras y asociarlas con diversas acciones del dueño. De ahí el efecto mágico cuando parece que el perro comprende y obedece perfectamente al dueño.
- Controle sus acciones y sus emociones. El dueño que constantemente critica al cachorro no obtendrá el comportamiento ideal de él. Incluso si no responde a la llamada, camina en el barro o hurga en la basura, se comporta como debería comportarse un perro. Si este comportamiento no le conviene, entonces no se debe regañar al cachorro, sino enseñarle a actuar de manera diferente.
- Aprenda a notar señales. Los cachorros se comunican con nosotros mediante el lenguaje corporal. Para demostrar que está feliz, asustado o incómodo, el cachorro le da señales a su dueño. Un ejemplo de tal señal es un gruñido. Si el perro gruñe, lo primero que debe hacer el dueño es analizar las razones de la aparición de tal señal y no tratar de responder con agresión a la agresión.
- Dale a tu cachorro la libertad de elegir. El cachorro no es un robot, sino un explorador inquieto. Por lo tanto, es importante brindarle la oportunidad de explorar. Por ejemplo, después del "trabajo de baño", puede darle la oportunidad de elegir adónde ir a continuación: en el camino, por el que caminaron muchas personas, o en los arbustos, donde hay muchos olores de otros perros.
- Haz caminatas lo más variadas posible. Caminar la misma ruta todos los días o nunca salir del patio es un ejercicio aburrido. Juegos, caminatas, trotar, repetición de comandos: lo que diversifica la caminata.
- Se consistente. Es imposible en los primeros meses antes de los 3 meses, permitir que el cachorro haga lo que le plazca, y luego de repente comenzar a educarlo y entrenarlo. Es necesario establecer un marco de comportamiento claro y factible para el cachorro y sostenerlo suave pero persistentemente.
¿Cómo entender si hay un contacto?
Elena Molodtsova, bióloga, especialista en comportamiento canino y fundadora de la escuela de adiestramiento de perros humanitarios, identifica tres componentes del contacto:
- adjunto archivo;
- comprensión;
- confianza.
Afecto: cuando un cachorro no solo se esfuerza por su dueño, lo sigue, sino que también siente una sensación de seguridad y comodidad. El cachorro se vuelve más seguro de sí mismo si su dueño está cerca. Corre hacia el dueño si tiene miedo y se convierte en un explorador más activo, sintiendo su cercanía.
Confíe desde el punto de vista del cachorro, cuando sabe que las acciones del dueño y sus reacciones al comportamiento siempre serán seguras y predecibles. Es por eso que muchos métodos de entrenamiento modernos eliminan el castigo: conducen a la desconfianza y al miedo.
Comprensión mutua: cuando el cachorro y el dueño no solo se han adaptado a vivir juntos, sino que comprenden las reacciones del otro y son capaces de afrontarlas.
¿Es posible que una persona y un perro vivan cómodamente sin contacto? Es posible, si su existencia es forzada, neutral y se minimizan todas las interacciones.