La secreción de los ojos es un síntoma de afecciones médicas graves. Las lágrimas transparentes se consideran la norma, pero la secreción purulenta debe alertar al dueño de la mascota. El gato debe ser mostrado al veterinario inmediatamente.
El motivo de la aparición de pus en los ojos
Una descarga liviana y acuosa puede ser causada por una reacción alérgica o daño mecánico en el ojo. El contacto con una infección fúngica o bacteriana se acompaña de una secreción purulenta, verde o marrón. La inflamación no desaparecerá por sí sola, el gato debe recibir tratamiento. El pus de los ojos puede acompañar a enfermedades de los párpados, la córnea, la conjuntiva y una infección viral.
El primer paso es mostrarle el gato al veterinario. La clínica realizará todas las pruebas necesarias, incluido un enjuague de la membrana mucosa del ojo. Después de las pruebas de laboratorio, puede diagnosticar con precisión y comenzar el tratamiento. Como regla general, se prescribe terapia general y local. Se prescriben antibióticos, ungüentos y gotas. Los medicamentos se recetan según la causa de la enfermedad. La automedicación o el acceso intempestivo a un médico conlleva graves consecuencias. El animal puede incluso morir.
Enjuagar el ojo
Antes de contactar a un médico, debe aliviar la condición de la mascota enjuagando los ojos. Para este propósito, es adecuada una decocción de manzanilla, furacilina al 0.02%, solución de ácido bórico. Es más conveniente realizar manipulaciones cuando una persona sostiene al gato y la otra se frota suavemente los ojos. Es necesario tomar un hisopo de algodón, sumergirlo en una solución tibia y exprimir el líquido en el globo ocular de la mascota. Continúe hasta que desaparezca todo el pus. Para no dañar el ojo, no lo limpie con un paño seco. Los hisopos de algodón no son adecuados para enjuagar, ya que absorben poco líquido.
Después del lavado, puede poner ungüento de tetraciclina al 1% debajo del párpado inferior, luego cerrar el ojo y masajear ligeramente. Es mejor calentar la pomada en las manos antes de usarla. Todas las manipulaciones deben realizarse con cuidado para no dañar los ojos y no asustar a la mascota enferma. Las lociones y ungüentos no pueden curar la enfermedad, pero solo facilitarán su curso. Por lo tanto, debe mostrarle el gato al veterinario lo antes posible. El tratamiento iniciado a tiempo preservará la vista y la vida del animal.
Cuidar a una mascota enferma
Los propietarios son responsables de los que han domesticado. Cada año, debe realizar una vacuna preventiva para proteger al gato de varios tipos de infecciones. Durante la lucha contra la enfermedad, se necesita mucha fuerza y energía. Para compensar la escasez, debe organizar una buena nutrición. La dieta debe incluir alimentos frescos más fortificados. Pero con los alimentos de la tienda, debes tener cuidado, pueden causar alergias y provocar esas secreciones muy purulentas de los ojos.